sábado, 27 de julio de 2013

Palabros!!!


Volar, magia... Mucho mas que palabras. Expresan de forma magistral un sentimiento. Una forma de vivir el amor. La pasada semana explicaba a un grupo de unas ocho personas mis experiencias swingers. Y lo hacia de la forma que mejor se. Como yo lo he vivido. Con amor, con cariño, con pasión, con complicidad y con una tremenda admiración  hacia mi compañera de juegos y de vida. Nadie de las ocho personas entre mujeres y hombres era capaz de entenderme, de entender como se dan esas miradas cómplices, ese profundo amor y respeto hacia mi compañera, esa mano que te coge desde la maraña de cuerpos y sabes perfectamente que es la suya. Esa pareja con la que hay un don especial y que se da cuando se da. Ese olor que te evoca confianza, ese volver a casa comentando complicemente la noche. Ese saber que entre decenas de personas que entran y salen de la cama, tu amas, deseas y quieres a una. Y es esa que vuelve contigo a casa después de una noche canalla. 
Y vuelas, y lo haces de su mano, en la mejor compañía posible. Y se produce la magia, eso tan difícil y escaso.
Y ella esta contigo y tu con ella. Y lo queréis todo, y lo queréis juntos. Y sois mágicos y por eso voláis .
Nadie entendia nada, y yo me sentía frustrado por no poder alcanzar a explicar con palabras, los sentimientos que vagan por mi cabeza. Quizás solo sea eso, que no se expresarlos. O algo que me calma mucho mas. Que los sentimientos no se pueden expresar con palabras. simplemente hay están, para quien los vive. Vivirlos!

domingo, 21 de julio de 2013

8.760!!!

8.760 horas y vuelves al mismo punto. Exactamente al mismo lugar. Al mismo infierno. A la misma locura. Y no tienes a nadie, y estas sola, y tu cabeza vaga sola, loca, perdida... Y no sabes pedir ayuda, y no quieres ayuda. Parece que en 8.760 horas no te dio tiempo a pensar. Con sus días y sus noches...

miércoles, 17 de julio de 2013

Arnés!

Siempre soñé con uno. Me parecen unos artilugios súper excitantes, morbosos, rompedores... Siempre pensamos en uno. Tu, con follarme, penetrarme, ver como me muero de placer. Ver como gesticulo y reacciono a tus embates, cada vez mas continuos y salvajes. Yo, me muero de ganas de ver esa cara desencajada, esos ojos fuera de si, esos gemidos y esa fuerza impresa en tu cara. Como si ese arnés fuera parte inseparable de ti. Pero fue solo un sueño. y no siempre se hacen realidad.

lunes, 15 de julio de 2013

365!!!

Trescientos sesenta y cinco días encadenado a ti. Día y noche. Atado, de pies, de manos. Azotado. Con un gran bocado que me impide hablar, decirte nada. Trescientos sesenta y cinco días de terror, de angustia, de zozobra. Trescientos sesenta y cinco días perdido en la ciudad, entre miles de personas. trescientos sesenta y cinco días de esclavitud, de sumisión. Trescientos sesenta y cinco...

domingo, 7 de julio de 2013

Dentro de ti!!!

Alguna vez... Bueno realmente muchas veces, lo pensé e incluso lo comente.
Me siento impotente al hacer el amor contigo. Quiero decir, ya no me basta con jugar contigo. No me satisface, no me vale. hemos hecho el amor en todas sus variantes, hemos jugado hasta el infinito. No hay nada nuevo. No hay nada mas. Lo hemos hecho todo y no puedo mas. Quiero mas.
Quisiera meter un dedo dentro de ti, luego dos, luego... ahora la mano, luego el brazo, el hombro, el... La... Y si! Entrar todo entero dentro de ti. Formar parte de ti, ser tu. Y vivir dentro de ti para siempre. Solo eso calmaría mi sed, mis ansias de ti. Déjame entrar en ti! Vamos!

viernes, 5 de julio de 2013

Valientes!

Cuando éramos valientes, cuando nos sobraban las fuerzas, la energía y la ilusión. Saltábamos de cama en cama, de fiesta en fiesta, de encuentro a tres a encuentro a cinco. Nos reíamos de la vida, del mundo... De nuestra sombra. Eramos como niños. Nos encantaba jugar. Teníamos, igual que ellos, , nuestras jugueterías preferidas. Sonreíamos a cada instante, y la vida nos respondía de igual manera. Buscábamos encuentros y ellos nos buscaban igualmente. Hacíamos locuras y como locos reíamos. Eramos bárbaros. Vivíamos bárbaramente. Nuestra cama crujía, nuestro sofá cedía. y los aullidos resonaban por toda la ciudad... Pero como bien he dicho, todo esto fue cuando nos sobraban las fuerzas, la energía y la ilusión.