jueves, 22 de febrero de 2018

Una copla en mi casa



Cuando se quiere de verdad el miedo es un carcelero.
Y el corazón se te muere si no te dicen te quiero.

Miedo, tengo miedo. De que vuelvas, de quererte.

Sueño contigo de noche y de día.
Sueño sudores fríos de no tenerte conmigo,
sueño con pesadillas de que te vuelvo a perder.

Pero estamos tan lejos que no podría ni verte.
Y cuando me tienes cerca piensas que soy un mal sueño.
Y no mi amor, no soy eso, yo soy de carne y hueso.

Aunque tu creas que he muerto, me llevas en tu pensamiento,
yo soy lo que mas amabas y tu estabas muy dentro

Es difícil que me olvides yo no lo hago un momento,
aunque beses otros labios, de hilo rojo estoy envuelto.

Ya nadie mas te ha azotado, solo sexo sin sentido, que es lo que hacen los humanos.  Lo nuestro no era la tierra, era volar en continuo, yo azotando tu volando juntos en todos los vuelos.

Eras mía yo era tuyo, nada podría alterarnos, pero entro la locura, el miedo tu carcelero, mi miedo eran mis piernas para escaparme corriendo.
Mientras tu enloquecías yo me escapaba corriendo y entre ven que soy tuyo y quédate que eres mía, la cosa se puso chunga y se interpuso el silencio.
Tu en tu casa y yo en la mía.
Tu en otros brazos estabas , yo en terapia de nuevo.
Pero no pasa nada, solo decirte de nuevo,
que era tuyo de veras, que yo con eso no juego.

QBB

lunes, 12 de febrero de 2018

Cuando éramos invencibles.


Ardiendo. Todo tu cuerpo ardiendo. Tu piel, tu sexo, tus labios, tu mirada de fuego, esa cera que no acaba de solidificarse por que tu cuerpo esta a la misma temperatura que ella.

Y mientras tanto yo te observo y ardo de deseo, mis ojos se encienden, mi mente calienta mi cuerpo y poco puedo hacer por mí.

Ya no soy dueño de mi cuerpo, de mis manos de mis palabras, de mis deseos, de mis instintos. 

Solo me queda esperar inmóvil a que se consuman las velas. No podría hacer nada mas, el espectáculo es tal que solo soy una estatua, con vida, pero sin capacidad de moverse de su pedestal.

Cuando eso ocurra solo quiero abrazarte contra mi, abrazarte tan fuerte que todos esos huesos rotos se unan y que ya todo sea un mal recuerdo, un mal sueño.

Ahora estamos juntos, tu y yo, y ya nada nos puede pasar. Juntos somos invencibles.

Te quiero. 

QBB